sábado, 28 de marzo de 2015

3- EL CAMINO DE LAS ALMAS. Parte III: “Reagrupaciones vibracionales”


            Se elevan las frecuencias de la materia planetaria y por ende, también las de la Humanidad. Todo se está elevando cada vez un poco más. Esta elevación vibracional ocurre en toda la Galaxia y en el Universo Local completo, donde la Vía Láctea está contenida. La Tierra es ‘un punto’ en el Océano Universal, pero no está exenta de la elevación y sutilización hacia La Fuente Central.
            El Universo Local (Nebadón) donde rige y gobierna el Cristo Universal, Micael, tiene una agenda evolutiva-espiritual que lo sitúa entre los 12 universos locales, que son como ’12 pétalos cósmicos’ del chakra cardíaco cósmico, en un sector mayor del Superuniverso. Quienes conozcan algo de la cosmogonía explicada en “El Libro de Urantia” podrán entender este tipo de señales. Quienes no sepan de tal Enseñanza, pero que igualmente estén preparados internamente, podrán de todos modos captar intuitivamente lo que estamos diciendo.
            El Universo Local, junto a sus “11 Hermanos Pétalos” (11 universos), es lo que se está elevando en vibración, para hacer girar la Gran Rueda Cardíaca Cósmica de ‘Aquel Gran Ser’ del cual nada puede decirse…
           
            Estas son señales metafóricas, aunque no por eso menos ciertas a nivel científico-energético, ofrecidas para favorecer el desarrollo de la capacidad intuitiva en ‘los estudiantes’ que se encuentran en proceso iniciático.
            Abrirse a la comprensión de conceptos sobre cosmología es parte de la preparación vibracional para las almas en proceso iniciático. Es porque comprendemos esa interna necesidad que ofrecemos estas pautas y enseñanzas. Nuestra labor está en línea directa con la verdadera necesidad de un grupo de almas que precisan de estas señales de contacto.
Agradezcan ser parte de estas Instrucciones, porque esto es un reflejo de las Instrucciones que las almas reciben internamente, cuando asisten por las noches de sueño del cuerpo, a las Aulas de Aprendizaje, en los planos astral y mental.
            Existe una creciente afluencia de ‘almas probacionistas’(1) que asisten a estas Aulas Internas. Las Enseñanzas que se dictan en esas Aulas poseen niveles, y a cada Aula asisten grupos de almas según los ‘niveles de conciencia’. Esta actividad ha crecido en los últimos 15 años, en forma vertiginosa, y lo que antes era una Escuela Espiritual Interna, con pocas Aulas, ahora se ha transformado en una Escuela con cientos de Aulas funcionando integradamente, en alternancia y simultáneamente, según la necesidad; todas atendidas por discípulos avanzados, de 3° grado, y supervisadas por Maestros de la Jerarquía Espiritual.
            Esto ha crecido de tal forma, debido a la elevación vibracional planetaria, con lo cual muchas almas han entrado por el Portal del Sendero Iniciático, comenzando con el probacionismo (período de pruebas), y muchos que ya eran probacionistas se han elevado a la condición de discípulos aceptados, para poder recorrer desde allí la larga Travesía de ascensión, cada vez más consciente, hacia La Luz.
           
            La HUMANIDAD, como Gran Alma, está en verdad, en un colosal proceso iniciático, y esto produce (y está produciendo), un ‘desgarro energético’, propio y natural en el orden de las cosas. Ese “desgarro” ocurre al tener que reagruparse las almas según sus posiciones vibratorias. Necesariamente deben ocurrir reagrupaciones vibracionales, y esto implica y determina cortes y fricciones, no sin conflictos, muchas veces con dolor, lo cual genera a menudo más enfrentamientos, oposiciones y nuevas fricciones.
            Las reagrupaciones vibracionales implican cortes y nuevos ´limites firmes y saludables’, bien establecidos, y esto es percibido por aquellas almas que lo comprenden debidamente, accionando en la dirección correcta con deciciones y acciones.
           
            La ‘bondad’ es necesaria, pero la insana “permisividad” se confunde comúnmente con ‘bondad’ y esto es un mal propio de los probacionistas, y también de muchos discípulos que aún deben completar esa línea de experiencia y aprendizaje.
Aprender a establecer los límites necesarios, sanos y de equilibrio, implica desafiar a la estructura psicológica educada en erróneos conceptos sobre lo que es ‘la bondad’. Es necesario meditar en estos significados, porque allí hay una clave que servirá a la mayoría de los estudiantes probacionistas que se sienten atraídos por El Sendero Espiritual, pero que no pueden avanzar por trabas de mandatos y creencias que impiden el libre fluir de la conciencia hacia nuevas comprensiones y experiencias.
            Nuestra intención en esta oportunidad fue dar dos pautas claras:

1-      La importancia del despertar de la Intuición a través de la apertura del corazón y de la mente a lo cósmico.
2-      La necesidad del establecimiento de límites sanos y saludables, que permitan a las almas despegar de sus herrumbradas posiciones vibracionales.
Reflexionad en ambos puntos.

Esta fue una señal más de contacto, en línea con la real necesidad de las almas probacionistas, e inclusive de discípulos que aún trabajan para ahondar en autoconocimiento y elevar la vibración.
Atended vuestras necesidades internas, con ‘atención’, reflexión e inteligencia.
Esto es todo por hoy, hermanos. Tenéis mucho que meditar.

En LUZ y PAZ:

PAX VITAE

           


1-      Almas probacionistas: Almas que están en un sendero de pruebas, para entrar al camino consciente del discipulado, que es el sendero de las Iniciaciones de la Conciencia.





miércoles, 25 de marzo de 2015

2- EL CAMINO DEL ALMA. Parte II: “El aura”


            En esta oportunidad daremos una explicación de cómo ocurren las experiencias que son atraídas por el alma peregrina encarnada en la forma humana material, y cómo esto se relaciona con ‘el aura’.
            Cada alma en la Tierra está en un ‘envase humano’ que corresponde a su herencia kármica. A la vez, la familia y la cultura donde nace (encarna) el alma se ajusta a sus necesidades de aprendizaje, lo cual también tiene que ver directamente con el karma.
            Karma es ‘acción no completada’, o bien, ‘aprendizaje incompleto’, el cual busca su integridad, su perfecto acabado. Lo que está incompleto es “deuda kármica”. Karma también puede entenderse como Ley de Retribución. A cada acto, sentimiento y pensamiento corresponde una retribución semejante a su naturaleza. Es decir, cuando el ser humano causa daño, el karma es la Ley de Retribución que devuelve a su ‘originador’ el daño causado, en forma de experiencia. Lo mismo ocurre con cualquier ‘bien’ causado, en cualquier forma.

            El acabado de toda acción incompleta es la Comprensión.
            Comprensión es acción íntegra, sin residuo, por lo tanto, sin karma.

            Esas frases son para la reflexión.
           
            Karma funciona como Ley de causa-efecto, que vuelve como ‘boomerang’ a su ‘actor’. Esto se repite incontable cantidad de veces, vida tras vida, hasta la Liberación final del alma, en la cual, al disolverse la ilusión del “actor” (el yo psicológico) ya no hay karma (ni bueno ni malo) debido a que el alma se funde con el Espíritu inmortal universal. Pero esto es una escala de conciencia muy superior, de la cual la Humanidad en su conjunto aún esta lejos. Todavía, en el presente actual, Karma es la Ley vigente, es aprendizaje para las almas, y antes de que llegue tal Liberación Final, el Alma de la Humanidad deberá atravesar caudalosos ríos de experiencias, superándolas a todas con creciente Comprensión.
 Toda Liberación, en cualquier nivel, tiene que ver con algún nivel de comprensión alcanzado; y la Liberación Final es la Comprensión Total, lo cual es Nirvana (extinción).

            Todo lo que el alma ha recorrido y aprendido en el ancho mar de la Vida, y todo lo que le queda por recorrer en experiencia, está ‘dibujado’ energéticamente en el aura.

            El aura es la expresión visible (para el clarividente) de la sumatoria de la conciencia(1).
            El aura es ‘el rostro’ del alma, pero dependerá de la profundidad con que se la pueda ‘leer’, para ver su verdadera situación en el Sendero.
            El aura es como ‘el vestido’ del alma. Ese “vestido” revela la condición del alma, pone en evidencia su estado. Esto es, claro está, simbólico, ya que el aura es de una gran complejidad energética, y al simbolizarla con ‘un vestido’, habría que imaginar, en tal caso, una vestimenta con variados atuendos y túnicas superpuestas…
            En este ‘vestido’ están bordados todos los acontecimientos pasados que dejaron huella de ‘experiencia con marca’, es decir, eventos que han significado algo importante y movilizador en el fuero interno del hombre.
            En el aura se registran todos los detalles, buenos y malos, “blancos, negros y grises”…, de todas las encarnaciones por las cuales el alma ha atravesado; pero mientras algunos registros son más perdurables (quedando de una encarnación en otra), otros son pasajeros.
            De todas las impresiones que se registran son perdurables y más duraderas las que han dejado una huella de comprensión o de gran dolor. Las experiencias de comprensión se alojan en el “Cuerpo Causal” (el alma humana propiamente dicha, en el plano mental superior); y las experiencias de dolor quedan especialmente en los átomos permanentes astral y físico y como registro etérico. Estas últimas, junto al karma (cierto porcentaje) que ha de afrontarse en la presente vida, son las causas de muchas de las experiencias que el hombre atrae a su vida como posibilidad de aprendizaje.

            Es decir que: “Un gran porcentaje de lo que un ser humano vive a lo largo de su vida está condicionado por las energías tejidas en su aura, las cuales generan las condiciones, por Ley de Atracción, de las experiencias de vida en sucesión”.
           
            A medida que el alma avanza en conciencia y va limpiando sus ‘vestiduras’ (el aura) de energías oscuras y densas, cada vez está menos condicionada y va aumentando así su posibilidad de elegir en forma consciente el camino a seguir. Es decir que, mientras haya mucha ignorancia y oscuridad en ‘el tejido del vestido’ (vibraciones del aura) esto atraerá mecánicamente y por Ley, condiciones de aprendizaje; pero a medida que el alma crece en AUTOCONSCIENCIA también va lavando sus vestiduras, y es capaz de forjarse a voluntad un presente y un futuro de luz y victoria.

            Estos son bosquejos generales de un conocimiento esotérico que, si se sigue en detalle, terminará por conducir al estudiante hasta el estudio de las Iniciaciones del alma.
            Por ahora, entender estos ‘bosquejos’ de ideas generales sobre “el alma y su mecanismo”, es una real necesidad para muchas almas, y es por ello que lo damos, de manera simple y clara, sin tantos tecnicismos.

            Lo importante en todo eso es la Comprensión, basada en un creciente ‘autoconocimiento’. Si estos informes sirven en algo a tal propósito, justificado quedará el esfuerzo y la energía puesta en manifestarlos.

            Paz y Luz para todas las almas!

Instructor Interno




1-     Sumatoria de la conciencia: En el aura se reúnen diversas energías de diferentes niveles de conciencia: la conciencia de la personalidad, la conciencia del alma, y la del espíritu (aún en embrión en la mayoría, excepto en los “Espíritus Descendentes” o ‘experimentados’). Todas esas ‘conciencias’ están combinadas según es desarrollo de cada corriente de vida.






lunes, 23 de marzo de 2015

1- EL CAMINO DEL ALMA. Parte I: “Conceptos preliminares”


            Amados estudiantes:
                                               En este especio nos ocuparemos de ofrecer enseñanzas claras sobre “el camino de las almas”. Estas enseñanzas coordinan con lo ya transmitido en esta serie de blogs: “Nuevas Señales”, en su mayor parte sobre el tema del ALMA.
            Interpretar correctamente, a nivel científico-esotérico, ‘lo que es el alma’ no es algo simple de lograr. La palabra ‘alma’ ha sido popularizada y empleada por todas las religiones y filosofías del mundo y en el terreno del arte literario ha sido un término muy usado para expresar y definir múltiples aspectos del sentir y de la interioridad del hombre y de la vida; pero rara vez se puede ver a alguien expresarse sobre el alma ‘con luces claras’ sobre el significado correcto a nivel esotérico.
            En el blog “El Alma” ( http://el-alma-humana-y-divina.blogspot.com.ar ) ya se han dado pautas conceptuales claras al respecto. En esa base conceptual estarán apoyadas las enseñanzas e instrucciones que en este espacio daremos.

            En primer lugar enunciaremos una pauta clara al decir que:

“El alma es la entidad energética en expansión de conciencia”.

Esto vale para todos los reinos de la vida, ya que todos los reinos poseen algún tipo de conciencia; existe la conciencia mineral, la conciencia vegetal y la conciencia animal, así como la conciencia humana y suprahumana, con todos sus niveles correspondientes.
El alma es ‘la vida’ en las formas creadas, y esta ‘vida’ va adquiriendo cada vez más experiencia, variando y creciendo en cualidades de conciencia a medida que pasa de una forma a otra. Después de adquirir experiencia en el reino mineral, el alma pasa a peregrinar a través del reino vegetal, (experimentando a través de grupos de plantas, árboles, flores, etc.), y luego pasa a experimentar a través de diversas formas animales, hasta llegar a “la forma-hombre”, donde adquiere, por vez primera la “individualidad”. En cada uno de los tres reinos infrahumanos el alma adquiere experiencia especialmente en un plano de vida. En el mineral adquiere conciencia física-material; en el vegetal, conciencia etérica; en el animal, conciencia astral, y cuando el alma pasa al reino humano comienza a adquirir conciencia mental (y profundiza las ya adquiridas), para luego proseguir más allá. Por eso se dice, en esoterismo, que en el hombre el alma es la mente (no la mente cerebral o inferior, sino la mente abstracta o superior); y por eso la actividad del intelecto y de la inteligencia son, en el ser humano, aspectos que deben ser ejercitados, porque iluminan su alma o conciencia.

Podríamos sintetizar diciendo que en el ser humano el alma es una entidad intermedia entre el aspecto material y el aspecto espiritual de lo que llamamos “hombre”. Es decir que entre ‘la parte humana’ y ´la parte Divina’ en el hombre, existe su alma. El alma del hombre es pues, su conciencia, pero esta conciencia puede estar volcada más al aspecto material de la vida o estar uniéndose más al aspecto superior, espiritual. Vale decir que el alma no es algo fijo, inmóvil, sino una entidad energética maleable, transmutable y transfigurable. El alma puede alquimizarse, puede mutar vibracionalmente y es allí donde estará basado nuestro estudio progresivo.

“El camino del alma es, justamente, un sendero vibracional”, el cual llevará al alma recién nacida, emparentada aún con el reino animal del cual proviene, a convertirse en ‘alma racional’ y finalmente en ‘alma espiritual’, al unirse a consciencia con el principio más elevado en el hombre.

Según lo dicho podrá ser entendido por qué decimos que el alma es un aspecto intermedio en el hombre, el aspecto que muta, que cambia, que se transforma, que aprende, y que se va iluminando cada vez más, y para ello necesita de sucesivas reencarnaciones en vehículos físicos humanos. La sucesión reencarnatoria es la fricción-desafío que el alma precisa para cambiar de vibración, elevándola cada vez más, desde su identificación sensorial con la materia hacia la identificación con el Espíritu. A la vez, el alma (después de cierto desarrollo) es también ‘el puente’ que utiliza el Espíritu para poder fluir hacia la personalidad, ejerciendo su poder y actividad transformadora.
  
Lo que permite elevarse al alma vibracionalmente es la adquisición creciente de ‘Comprensión’, lo cual logra capitalizando cada experiencia que vive como personalidad terrenal. Cada existencia terrenal es para el alma como un día de clases en la Escuela de la Materia, donde aprende nuevas lecciones de comprensión, lo cual le permite ir subiendo de grado. El curso completo de la Enseñanza concluye cuando, después de innumerable cantidad de ‘días’ (encarnaciones) asistiendo a la ‘Escuela’, el alma llega a la cumbre de la Comprensión, cuando ha encontrado la síntesis de la vida y superado los espejismos materiales. Cuando el alma ya es dueña de sus actos, pensamientos y sensaciones, y conociendo las Leyes que rigen la Vida, juega a favor de estas, con sabiduría, y no al revés (es decir, recibiendo los golpes como consecuencia de ir en contra de las Leyes), entonces, llega así a graduarse en La Escuela de la Vida, pues ya nada queda por aprender, al menos, en la Escuela Material-Tierra… Su aprendizaje proseguirá, pero ya sin necesitar reencarnar en cuerpos materiales.
La ‘graduación’ es, simbólicamente, la transformación alquímica del alma, la cual deja de responder al ‘deseo’ para responder al Amor y a la Voluntad. Esta ‘graduación’ posee ciertos niveles, antes de llegar a la graduación final, y esos niveles han sido llamados INICIACIONES, a nivel esotérico.
Entender las “INICIACIONES DEL ALMA” es entender, al menos como en ‘un mapa’, el sendero que el alma deberá recorrer, y los desafíos que habrá de superar. Por eso es importante, para todo estudiante, tener aunque más no sea ideas básicas sobre “el Sendero Iniciático”, ya que este es el camino que todas las almas deberán transitar tarde o temprano, y que un gran grupo está transitando ahora…
Interesarse en este tema no es un simple ‘pasatiempo’…, sino parte de un necesario AUTOCONOCIMIENTO. Por eso decimos a todos “los estudiantes”, que son “las almas”, que estudien la naturaleza esotérica de ‘el camino de las almas’, y así comenzarán a entender más y mejor “su camino”, por el mar de la existencia.
Así nos despedimos, hasta un próximo encuentro.

Vuestros Hermanos en la Luz.



PAX CHRISTI